Hoy me he levantado con otra noticia que me entristece: Futura había llevado sus aviones a sus bases y cancelado las operaciones. El objetivo era plantear una “suspensión de pagos”. Al parecer todo se ha hecho con muy poca información hacia los trabajadores de la empresa.
Es una lastima que una compañía como esta haya llegado a esta situación. Siempre recordaré Futura como una compañía que trataba bien a sus trabajadores, que era un ejemplo de compañía rentable, con aviones modernos (normalmente), con unos trabajadores que se volcaban con ella.
Espero que el ir a Concurso de acreedores le permita salvarse y veamos en pocos años una nueva Futura, más fuerte aún.
Esto se une a la ya delicada situación de Spanair y deja muy tocado al sector aeronáutico balear, un sector en el que estaban la mayor parte de aerolíneas del país y que, poco a poco, parece tener un futuro muy negro.
Un abrazo a todos los que trabajáis en ella, os deseo muchos animos.
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